El sueño de querer ahorrar $100 al mes.

Recuerdo con cierta nostalgia y un poco de vergüenza, mis primeros intentos por ahorrar. Me auto impuse una meta de  ahorrar $100 al mes y durante aproximadamente 16 meses fué un fracaso absoluto.

Hay que dejar las cosas claras. Yo trabajaba en ese momento en una aerolínea y ganaba relativamente bien. Vivía con mi papá y no tenía mayores responsabilidades. Mi estilo de vida era bastante sencillo y ni siquiera tenía tarjetas de crédito o préstamos. Pan comido decía yo.

Con esa pequeña “sorpresa” que aún no teniendo responsabilidades y un salario relativamente alto (ganaba apróximadamente $1,100 a $1,200 libre al mes) nunca tenía suficiente para ahorrar $100. Siempre el mes comenzaba prometedor y me iba ajustando de tal manera que me quedaran $50 al final de la quincena. No tenía ni presupuesto ni un control de gastos así es que a la hora de ir al banco a revisar mi cuenta siempre estaba en cero.

Intenté usar diferentes métodos: Sacarlo al principio de mes y guardarlo en una gaveta sin tocarlo, dejarlo en otra cuenta con una tarjeta de débito diferente, la cual quedaba en casa, pero nada funcionaba. Ahorrar $100 al mes era misión imposible.

El mal augurio.

Durante 14 meses intenté infructuosamente buscar una alternativa. Cuando noté que me sería imposible lograrlo por mis medios (un amigo me lo hizo ver con una frase muy elocuente: “Tenés el manejo del dinero de un simio”) entendí que primero debía estudiar donde se fugaba ese dinero.

Salidas a comer con amigos, regalos a novias, amigas o pretendidas. Salidas en grupo al cine y a cenar. Una carnita asada en casa de un amigo etc. El problema no era si había suficiente dinero o no. El problema es que había demasiada vida social. Debí haber previsto que eso era un augurio de los problemas financieros que tendría después, pero lo entendí demasiado tarde.

El no tener la capacidad de ahorrar $100 aún cuando ganaba relativamente bien y mis gastos de vida eran mínimos, (Debería haber podido ahorrar al menos la mitad de lo que ganaba), se vió magnificado cuando empecé a ganar realmente bien ($2,000 a $5,000 semanales) en mi primer negocio. Ahí ya no me interesaba ahorrar, comencé a derrochar y solicitar tarjetas de crédito y préstamos sin necesidad ni sentido. Obviamente, nunca tuve cinco centavos de ahorro.

El método efectivo.

Después de todos mis problemas financieros, mi hundimiento absoluto en deudas y comenzar a entender la importancia de este hábito y sólo cuando estuve altamente convencido de que era la forma correcta de conseguir el éxito financiero que tanto anhelaba encontré la forma correcta. Forma que al día de hoy es la ÚNICA forma que he encontrado que me funciona.

Como ahorrar $100 al mes sin dolor.

He aprendido que cuando tengo una meta de ahorro debo depositarlo en una cuenta de cheques sobre la que no tengo ni tarjeta de débito ni chequera. Hacer el depósito es rápido y sencillo. Sin embargo si necesito RETIRAR el dinero, debo ir al banco, hacer una cola de más de una hora, demostrar que soy el dueño de la cuenta y pedir un cheque sobre el cual tengo que pagar una comisión. Es evidente que ahorrar $100 al mes con éste método ya no es un problema.

He aprendido a conocerme y darme cuenta que tengo un problema de alergia al dinero. Que si tengo $10 en mi bolsa al salir de casa éstos no regresan. Por lo tanto ANDAR sin dinero es la única forma que me ha permitido TENER dinero. Y lo gracioso es que después de empezar a hacerlo así, el dinero no me ha hecho falta. Porque lo gastaba en cosas que no necesito, privarme de el ha sido la manera más efectiva de lograrlo.

Fué la única forma que encontré de poder ahorrar $100 al mes.

Si aún no tienes claro porque ahorrar es importante te invito a que leas uno de mis artículos anteriores: Ahorros ¿Para Qué?

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