“Seamos realistas, soñemos solo lo imposible”: Ernesto “Che” Guevara.

Entiendo el bloqueo mental de estar en una situación extremadamente difícil. Creer que esa vida que los demás tienen es imposible de alcanzar.

Miras a tu alrededor y nadie pareciera tener problemas. Sientes que eres el único y que no sirve de nada explicarles porque no lo entenderían.

Crees que eres el único con esos problemas tan graves. Crees que estás solo.

Pero no lo estás.

No importa que tan profundos sean tus problemas, siempre hay mas que están como tú.

Te diré que es lo importante: Hay salida para tu vida.

Ahora respira profundo, cierra los ojos y dilo conmigo: “Hay salida para mi vida”.

Todos tus sueños son alcanzables. La vida que quieres, la casa que quieres, el carro que quieres, la cuenta bancaria con la que sueñas, la paz mental que deseas. ¡TODO EXISTE!

Te preguntarás entonces ¿Por qué no las tengo?

Existen 2 razones principales.

• Porque crees que es imposible
• Porque al creer que es imposible, no trabajas para ello.

Esto me recuerda una vieja historia.

Un muchacho se durmió durante una clase de matemática. Cuando despertó vió que había 2 ejercicios en la pizarra. La tarea del día siguiente claro. Llegó a su casa y no sabiendo por donde comenzar comenzó a investigar. No quería preguntar a nadie de la clase porque había sido él quién se había quedado dormido y no quería pasar por idiota.

Pasó una semana trabajando en los ejercicios y maldiciendo al maestro por dejar cosas tan complicadas. A la semana, logró resolver uno de los 2 ejercicios y lo llevó al maestro. El profesor, boquiabierto, le explicó que eran enigmas matemáticos que se tenían por irresolubles.

Nadie más intentó resolverlo porque el profesor había dejado muy claro que eran imposibles de resolver. Nuestro héroe no lo sabía.

Cuando tu estás convencido que no hay forma de que las cosas te vayan mejor no harás tu mejor esfuerzo. Debes estar convencido que hay muchísimo más para ti de lo que estás recibiendo.

Lo digo en serio.

Respira profundo, cierra tus ojos y repite: “Hay salida para mi vida”

Repítelo más fuerte: “Mi vida puede ser mejor de lo que es”.

Grita: “Puedo tener una vida espectacular si me propongo a hacerlo”.

Pero es más que decirlo. Es creerlo. Es decirlo todos los días. Escríbelo en muchos papeles y pégalos por toda tu casa. Repítelo todos los días.

No hay asesino de sueños más grande que tus propias convicciones.

Una vez escuché a un millonario decir que uno de sus momentos más tristes fue cuando llenaba el tanque de gasolina de su Ferrari, un niño se le acercó y le dijo: “WOW, jamás podré tener uno de esos”.

Un niño de 9 años que está convencido que jamás tendrá un carro así vivirá su vida sin intentar conseguirlo.

Si tu quieres que tu vida sea mejor, si quieres alcanzar esos sueños que aún no han muerto. Si sueñas con vivir de diferente manera debes estar convencido que si se puede. Si quieres ganar dinero sin trabajar. Salir de deudas, viajar, lo que sea.

Es la única manera en la que harás tu mejor esfuerzo por conseguirlo.

¿Una vez más?

Dilo en voz alta: “Puedo lograr TODO lo que me proponga”

 

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