Si has seguido leyendo hasta acá, probablemente ya diste el primer paso. Que es aceptar que estás en el camino equivocado. El segundo paso es: Tomar responsabilidad sobre tu vida.
A lo mejor crees que porque pagas tus tarjetas, el colegio de tus hijos, los recibos de agua y luz y la renta at tiempo eres financieramente responsable.
Es muchísimo más que eso. Es entender que la impotencia a ganar dinero viene de no tomar responsabilidad de tu vida.
El tiempo que pasas jugando a la PS4, viendo Facebook, viendo televisión (Si, Netflix cuenta aunque lo veas en el teléfono) leyendo mangas, etc. Es tiempo que estás perdiendo. No digo que no haya que tener momentos de ocio, digo que debes aprender a tenerlos a cuentagotas.
Una vez hayas alcanzado la libertad financiera, podrás hacerlo durante 24 horas al día si quieres, aunque probablemente para entonces, hayas desarrollado una ética de trabajo tan estricta que ya no desees hacerlo, sobre todo porque estás viendo los resultados de tu esfuerzo.
Tienes que dejar de esperar que otros te hagan rico.
Tienes que dejar de poner tu plan financiero en manos de nadie más.
Tienes que saber que lo que tienes es lo que mereces, ni un centavo más, ni un centavo menos.
Deja de esperar un aumento de salario, o la llamada de esa compañía extranjera que te ofreció trabajo hace 6 meses y no has vuelto a escuchar de ellos. Deja de soñar con los programas de hacerte rico en 6 semanas y ponte a trabajar.
A menos que estés en una situación desesperada, no hablo de encontrar un segundo empleo. Hablo de sentarte a trabajar y sembrar tu árbol de dinero (Véase sección de negocios, “Los árboles de dinero”)
Cuando hablo de responsabilidad no hablo de la disciplina de hacer las cosas, es la responsabilidad de rendir cuentas y declararse culpable de sus errores.
Si su contador lo estafó. ¿Quién es el idiota? ¿El contador o el que lo contrató?
Si su amigo nunca le pagó el dinero que usted le prestó ¿Quién es el idiota? El que nunca pagó o el que le prestó el dinero?
Cuando te responsabilizas de tus acciones algo maravilloso sucede: La victimización desaparece y encuentras la sabiduría. Cuando sabes reconocer que todo lo que ha salido mal en tu vida es culpa tuya, un nuevo nivel de autoconocimiento aparece y nos eleva.
Cuando entiendes que nadie te hará rico, que eres tú el único que puede hacerte rico y que para eso debes trabajar como nadie. Entonces y sólo entonces, comenzarás a caminar por el camino correcto.
Nadie ha dicho ni que es fácil ni que es rápido. Pero te garantizo que si dedicas tu mente y cuerpo a cambiar tu situación financiera, en un año habrás visto muchos avances y en 7 años, estarás donde hoy no puedes ni imaginarlo.
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